Quiero la libertad,
la libertad en plenitud.
Rompe tú mis cadenas…
Un pájaro enjaulado soy yo
ábreme la puerta.
Quiero volar, volar,
llegar muy lejos.
Pues me hiciste, Señor, interminable
libérame,
libérame tú.
No me hablen de ocaso,
porque mis ansias son amaneceres.
No me hablen de abismos,
porque tiendo a mirar hacia las cimas.
¬No me hablen de sombras
cuando busco luz.
No me pidan ni quieran que yo actúe'
con estrecheces y angustias.
Ya entiendo otro lenguaje
desde aquel día en que empezaste tú
a hablarme por amor
de lo que es el amor.
Tú que eres libre,
rompe al fin mis cadenas.
Libérame,
Impúlsame a volar.
Abre la puerta que me aísla en mi casa,
y haz que salga de mí.
Y en mi camino cerca te sentiré.
Libérame
Libérame tú.
Consuelo Ojeda